Solo existen dos maneras de volver donde ya se estuvo; una es darse la vuelta, la otra darle la vuelta al mundo.

No me gusta la gente que cree que te conoce por lo que dicen de ti, y tú siempre me gustaste porque preguntabas primero. Supongo que las cosas cambian, y que la confianza es algo que se gana muy lentamente y se pierde en un segundo. Me alegro de que creas conocerme aún, y siento ser yo la que te diga lo mucho que te equivocas. Y si no quieres que te diga nada más, solo espero que algún día te des cuenta. Tú me lo pediste una vez, y yo ya lo he hecho.